A la pregunta de si se puede teñir una peluca de cabello natural o una prótesis capilar siempre que sea de pelo natural, la respuesta es sí. Pero parafraseando a Felipe González tenemos que añadir: «Sí de entrada, pero…»
Es decir, ¿Se puede teñir una peluca o una prótesis capilar? Sí, PERO tenemos varias razones por las que el proceso puede ir fenomenal o ¡irse de tus manos!
1) Aunque el pelo natural se tiñe con productos cosméticos, cuando hablamos de una peluca o de una prótesis capilar no contamos con el calor. Me explico, una persona humana tiene una temperatura corporal que oscila entre los 35 y los 37 grados. En una prótesis o una peluca esto no sucede, y esto es algo que influye en la reacción química que produce cualquier tinte cosmético y el peróxido con el pelo.
2) Desconoces qué tipo de procesos químicos han sido aplicados en ese cabello antes. No sólo si ha sido teñido o no (eso lo puedes confirmar con tu proveedor) si ha sido o no fumigado, si lleva algún tratamiento de silicona o de queratina para sellar cutículas, de brillo etc…
3) Tenemos una peluca de cabello indio virgen con reflejo cobrizo, pero queremos aclararlo y que el subtono sea dorado o ceniza. Parece sencillo: sólo habría que aplicar un tinte de la numeración X.1, ¿verdad? En realidad no es así. Cuando aplicamos peróxido para subir uno o dos tonos, las características del pelo asiático, por su eumelanina oscura, siempre va a tirar a cobre o naranja. Lo importante después de aclarar es matizar. Y es un trabajo que es mejor realizar en un salón profesional de peluquería y estética, preferiblemente especializado en prótesis o pelucas. Si compramos un tinte ceniza en un supermercado de uso doméstico y lo aplicamos en nuestra prótesis o peluca sin tener más conocimiento de causa, nos ocurrirán dos cosas:
– Lo puede aclarar pero el resultado seguirá siendo cobrizo o naranja (aunque el tinte sea ceniza).
– Conseguirás el matiz ceniza pero el cabello quedará más oscuro (no más claro).
Si tenemos una peluca o prótesis de cabello europeo remy o europeo remy virgen, esto no suele ser un problema, ya que podemos controlar mucho mejor el color final deseado.
4) Proteger nudos y base. Un tinte, aunque sea de uso doméstico, siempre es un químico que produce cierta abrasión en el pelo. Si no conoces la técnica de aplicarlo en una prótesis capilar o peluca, puedes ensuciar su base, debilitar el sellado o sus nudos.
5) Conocer las mezclas. En peluquería los tintes se confeccionan a la medida del cliente, en función de los resultados que queramos obtener, combinando los pigmentos y el peróxido de diversos porcentajes. Cuando adquirimos un tinte de «caja» en un supermercado, ya no podemos jugar con las proporciones ni con la escala cromática, sino que debemos aplicar «lo que hay». Normalmente un pigmento intenso porque el peróxido tiene un volúmen bajo. El resultado suele ser un tono mucho más oscuro al principio pero que pierde muy rápido con los lavados, incluso con el primero. Una báscula de precisión es una herramienta de trabajo indispensable para cualquier peluquera, además del peine y de las tijeras.
6) Si deseas liarte la manta a la cabeza y teñir tú misma o tú mismo en casa, ¡por supuesto! Pero te recomendamos que, si dudas entre dos tintes de uso doméstico, compres siempre el color más claro. La buena noticia es que los tintes que son para personas no profesionales del sector, los de la cajita, son bastante reversibles. Desde luego si deseas oscurecer un sistema o una peluca, casi seguro que lo harás muy bien, pero aclarar y matizar es algo un poco más difícil. Bueno, si las cosas se ponen «negras», ¡consúltanos! info@free-style.es / 633810340.
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